Cartas a la Redacción

Toluca, México; 2 de mayo de 2025

Dirección de Contenidos de Todo en Contra

P R E S E N T E

Esta información que ahora compartimos la tienen en su poder más de diez periodistas y hasta ahora ninguno se ha atrevido a publicarla. A lo mejor porque no son universitarios y no entienden la importancia de que los consejeros que nos representan sean personas honorables, elegidas por su comunidad. O quizá porque tienen convenios jugosos con la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx). Como sea, hoy nos atrevemos a mandarles está información con la esperanza de que ustedes sí la publiquen.

La elección la ganará la candidata oficial (Eréndira Fierro) si nadie hace algo para poner en la mira a quienes realmente tienen la responsabilidad de elegir, y que además emitirán un voto secreto, que es lo más peligroso de este proceso de por sí ya muy enlodado.

¿No les parece que el proceso de renovación de la Rectoría de la UAEMéx cada vez se parece más a una película de mafiosos? Lo peor es que todos estamos viendo a los protagonistas mediáticos y nadie se ha preguntado quiénes son los personajes que en la práctica van a tomar la decisión de elegir a la primera rectora.

De entrada, habría que cuestionar a la mayoría del Colegio de Directores que tiene voz y voto en el Consejo Universitario y que además ha designado a los consejeros alumnos y profesores en sus espacios. Para nadie es un secreto que los dedazos en la UAEMéx comienzan con la bendición que Carlos Eduardo Barrera Díaz, actual rector, les ha dado a sus afines para ser elegidos como directores y ellos, a su vez, han ungido a sus consejeros.

Para darnos una idea de cómo están las cosas es necesario saber que hay un grupo autodenominado “De la luz”, cuyos integrantes son, en su mayoría, directores de espacios académicos. La lista de personajes es la siguiente: 

Alejandra Carmona, coordinadora institucional de Equidad de Género; Mireya Núñez Martínez, directora de la Facultad de Antropología; Desiderio Rodríguez Velázquez, director de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia; Luis Enrique Díaz Sánchez, de la Facultad de Ciencias; Juan Carlos Montes de Oca López, director de la Facultad de Contaduría y Administración; Alejandra López Olivera Cadena, directora de la Facultad de Lenguas; Gaspar Estrada Campuzano, director de la Facultad de Ciencia Agrícolas; Rodrigo Huitrón Rodríguez, ex director de la Facultad de Geografía; Beatriz Adriana González Durán, directora de la Facultad de Humanidades; Laura Elizabeth Benhumea González, ex directora de la Facultad de Ciencia Políticas y Sociales, así como aspirante a rectora; Sandra Morales Hernández, directora de Apoyo Académico a Estudiantes; Sandra Ochoa Díaz, directora de la Facultad de Economía; Ulises Velázquez Enríquez, director de la Facultad de Odontología; Isidro Rogel Fajardo, director de la Facultad de Planeación Urbana y Regional; Yaneli Daniela Palmas Castrejón, ex encargada del Despacho de la Dirección de la Facultad de Turismo y Gastronomía; Víctor Varela Guerrero, ex director de la Facultad de Química y Ana Vianey Suárez Castro, ex encargada del Despacho de la Dirección del Plantel “Mtro. José Ignacio Pichardo Pagaza” de la Escuela Preparatoria.

¿Y para qué se reunía intensamente hasta finales de 2024 dicha agrupación de directores y funcionarios universitarios? Pues para comer y beber, para definir sus preferencias políticas en la Universidad y fantasear con los puestos que tendrían en el nuevo gabinete. También para armar estrategias que les permitieran ser bien vistos por el rector. Para eso se juntaron e hicieron un bloque de fuerza que buscaba el apoyo incondicional a Carlos Barrera Díaz, a quien incluso agasajaron en su más reciente cumpleaños, en julio de 2024, en un festejo que entonces organizaron Isidro Rogel, Desiderio Rodríguez, Alejandra López, Ulises Velázquez y Juan Carlos Montes de Oca (este último dice que será el secretario de Docencia en la administración de Eréndira Fierro).

Hay que decir que entrar al grupo De la Luz se consigue sólo por invitación y votación de esa especie de secta, que además fue cambiando desde su creación porque, por ejemplo, Laura Benhumea fue anfitriona en al menos dos reuniones, pero a medida que mostraba su intención de buscar la Rectoría, la fueron haciendo a un lado.

Hoy ya no se reúnen, al menos no todos, pero se ven en los consejos, tienen comunicación en grupos digitales y, sobre todo, siguen con sus complicidades. Lo curioso del asunto es que algunos de esos incondicionales a Eréndira Fierro y al rector, esos pachangueros muchachos, integran la Comisión Electoral. Y de ellos nadie se ocupa, aunque fueron quienes ratificaron o rechazaron el registro de los participantes. Son ellos los que se hacen tontos a la hora de los reclamos de las aspirantes y de quienes las representan.

Para ser más claros, dos de los cuatro directores que forman parte de la Comisión Electoral son miembros del grupo De la Luz: Ulises Velázquez, de la Facultad de Odontología y Beatriz Adriana González, de la Facultad de Humanidades, hoy en paro a pesar de los sucios esfuerzos de ella misma por evitarlo y quedar bien con su jefe. 

También hay que decir que cuatro profesores consejeros que participan en la mencionada Comisión están adscritos y son incondicionales de los directores de facultades dirigidas por el grupo De la Luz: Contaduría y Administración; Turismo y Gastronomía; Lenguas y Medicina; Veterinaria y Zootecnia. ¿No es mucha casualidad?

Lo más triste es la posición de los consejeros alumnos, a quienes se les presiona o se les ofrecen prebendas. Cinco de los ocho espacios de la Comisión Electoral fueron asignados a representantes de las facultades involucradas en la secta De La Luz: Economía, Química, Humanidades, Medicina Veterinaria y Zootecnia y Planeación Urbana y Regional.

Sólo así se explica por qué la Comisión Electoral ha guardado silencio inexplicable y muy sospechoso ante los escándalos que rodean el proceso de elección. Lo peligroso es que los consejeros universitarios, ya intimidados o por conveniencia, den su voto a Eréndira Fierro, cuya llegada a la Rectoría representaría la continuidad del peor rector de la historia universitaria. De él, muchos olvidan que llegó al cargo tras “bajar” a sus contrincantes ayudado por el gobierno estatal.

Las fotos que incluimos demuestran que las reuniones no son una invención. Se sorprenderían del nivel de las conversaciones de los integrantes de ese grupo, y sobre todo de sus arreglos y sus ambiciones, tan lejos de la verdadera Universidad.

En la foto número 1, ambientada en una alberca, aparecen, de izquierda a derecha, Luis Díaz, Juan Carlos Montes de Oca, Vianey Suárez, Desiderio Rodríguez, Alejandra Carmona, Ulises Velázquez, Isidro Rogel, Alejandra López Olivera, Laura Benhumea, Sandra Ochoa y Sandra Morales.

La segunda fotografía, que fue tomada durante una comida, están Ulises Velazquez, Isidro Rogel, Juan Carlos Montes de Oca, Víctor Varela, Rodrigo Huitrón, Alejandra Carmona, Sandra Morales, Laura Benhumea, Alejandra López Olivera y Luis Díaz

La foto número 3, un grupo se reúne en un bosque y salen en esa toma Vianey Suárez, Rodrigo Huitrón, Mireya Núñez, Ulises Velázquez, Gaspar Estrada, Sandra Morales, Sandra Ochoa, Isidro Rogel, Beatriz Adriana González, Alejandra López Olivera, Alejandra Carmona, Juan Carlos Montes de Oca, Luis Díaz y Desiderio Rodríguez.

La cuarta imagen, tomada en un restaurante, muestra a Luis Díaz, Rodrigo Huitrón, Sandra Ochoa, Alejandra López Olivera, Desiderio Rodríguez, Isidro Rogel, Beatriz Adriana González, Ulises Velázquez, Alejandra Carmona, Sandra Morales, Víctor Varela y Juan Carlos Montes de Oca.

Atentamente

Miembros de la comunidad universitaria de la UAEMéx

Nota:

Los redactores de esta carta se identificaron plenamente ante la Redacción de Todo en Contra y solicitaron permanecer en el anonimato debido a los riesgos que, de acuerdo a ellos, les implican revelar esta información. Esa petición ha sido respetada.