La empresa Vento Motorcycles U.S.A., con más de mil empleados en su planta del parque industrial Santín en Toluca Park II, impuso unilateralmente un cambio de turno que viola la ley y elimina beneficios laborales, en respuesta trabajadores han decidido ausentarse y protestar.
La medida, que obliga a los trabajadores del turno vespertino a cumplir un horario completamente nocturno, aviva un conflicto que se enmarca en un patrón de irregularidades al respecto en la zona.
El anuncio llegó el pasado 18 de diciembre cuando sin negociación previa, el área de Capital Humano informó que, por “causas de fuerza mayor”, a partir del lunes 22 de diciembre el turno de 4:00 pm. a 1:00 a.m. quedaría reconfigurado a un turno nocturno de 9:00 p.m. a 6:00 a.m., eliminando de tajo el apoyo de transporte empresarial.
Apenas el 27 de noviembre la inconformidad ya se había hecho patente, pues de acuerdo con distintas denuncias se realizaron votaciones para elegir representación sindical. Sin embargo, muchos trabajadores no aparecieron en esas listas para sufragar, pues hay cinco razones sociales distintas. Esta situación buscaba beneficiar a un sindicato patronal, lo que provocó inconformidad y exhibió una práctica de contratación prohibida en México.
Ahora, ante el reciente anuncio que se dio sin previo aviso, el Sindicato Nueva Generación le dirigió un escrito a la empresa a nombre del secretario general, Luis Alberto Favela González, en el que cuestionó la medida y demandó a la empresa, cuya razón social es REJMY MÉXICO, que permita ingresar al sindicato para hablar con sus agremiados.
“No tienen derecho a modificar los horarios y eliminar condiciones de trabajo como una forma de escarmiento hacia los compañeros por querer tener un sindicato que no permita los abusos que ustedes cometen”, señalaron en el documento.
Para el viernes 19 de diciembre obreros reportaron que de 10 líneas solo operaron 5 por la falta de personal, debido a que algunos decidieron ya no asistir a laborar por las nuevas condiciones.
Además la situación ha escalado pues la empresa ha iniciado despidos, un trabajador denunció que le pidieron firmar un documento y aceptar un pago de 700 pesos de fondo de ahorro y 700 pesos de finiquito, lo cual rechazó.
Una jornada laboral de 9 horas
Más allá del conflicto sindical, los cambios anunciados y las condiciones actuales, de acuerdo con Carlos Suárez Benhumea, experto en derecho laboral y docente de la UAEMex, corresponden a jornadas que exceden lo establecido en la ley.
“Esencialmente son dos temas: primero, el tiempo extra. Quizá no lo tengan muy presente los trabajadores, sin embargo, los trabajadores laboran 9 horas en horario nocturno, cuyo máximo legal es de 7 horas, por tanto, con fundamento en lo dispuesto por los artículos 60 y 61 de la Ley Federal del Trabajo se advierte que laboran ese tiempo extra, por tanto lo pueden reclamar en un juicio, entre más pronto mejor, porque prescribe en un año. Y segundo, cuando el patrón modifica unilateralmente las condiciones de trabajo sin autorización del Tribunal. En términos del artículo 51 de la Ley Federal del Trabajo los empleados pueden demandar la rescisión de la relación laboral argumentando terminación por incumplimiento del patrón con lo pactado. Solo que aquí la acción prescribe en un mes, es decir, tendrían que tomar la decisión lo más pronto que se pueda”.
Suárez también aclaró que el artículo 64 de la ley Federal del Trabajo señala que cuando los empleados no puedan salir del área de labores durante el tiempo de comida se debe computar como parte de la jornada de trabajo. Por ello se afirma que trabajan 9 horas diarias, es decir, dos horas extraordinarias diarias.
Ahora bien, respecto a la eliminación del transporte empresarial en términos del artículo 51 de la Ley Federal del Trabajo, esto implica una reducción salarial, por tanto, el trabajador puede reclamar, en primer término, la rescisión de la relación laboral y la indemnización en el términos del artículo 50; y en segundo, el pago del tiempo que le adeuden del transporte.
¿Qué ruta se puede seguir legalmente?
Una de las recomendaciones principales es que las trabajadoras y trabajadores no firmen ningún documento ante estos cambios, porque puede hacer improcedente sus reclamos por la vía legal.
La instancia que les compete para dar seguimiento al proceso es el Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral (CFCyRL), que no saldrá de vacaciones. Por tanto los trabajadores pueden comenzar el procedimiento inmediatamente, lo cual puede realizarse por distintas vías, como la de la Procuraduría Federal de la Defensa del Trabajo (Profedet), el sindicato o mediante un abogado laboral. Al respecto Suárez considera que las primeras dos pueden ser perjudiciales pues suelen colocarse del lado del patrón.
El procedimiento previo al proceso judicial, que se lleva en el CFCyRL se puede realizar en línea, posteriormente se firma la demanda y el trabajador prácticamente solo se presenta de forma física a una audiencia en el Tribunal Federal, ubicado en Av. Sor Juana casi esquina con Av. Morelos en Toluca, para lo cual no tendrían que erogar dinero.
Otra recomendación para los trabajadores es que si alguien es despedido debido a estas inconformidades es fundamental que inmediatamente se asesore y demande, evitando en todo momento firmar cualquier documento como la renuncia.
Un patrón en el corredor industrial
El conflicto en la empresa norteamericana Vento Motorcycles no es un hecho aislado. Revela una violación sistemática de derechos laborales en el corredor industrial de Toluca y a nivel nacional, prueba de ello fueron las denuncias y protestas en la fábrica de Plásticos Italianos.
Frente a este escenario, organizaciones como la Unión General de Trabajadores de México plantean una respuesta que va más allá de lo jurídico. En entrevista, integrantes de esta organización argumentaron que la solución de fondo pasa por “elevar el nivel de conciencia y organización de los trabajadores”, razón por la que buscan construir una fuerza colectiva en las distintas industrias mediante la creación de talleres sindicales, democratización de sindicatos, impulso de medios de comunicación y denuncia, así como espacios de organización que le hagan saber sus derechos al trabajador y le apuesten a la movilización, rebasando la estructura laboral y jurídica que ha sido impuesta y limita por todas las vías los derechos de los trabajadores.
«De acuerdo con todas las medidas que nos han impuesto, primero debemos construir un sindicato independiente, alcanzar su registro y la toma de nota, después ganar la titularidad -en una empresa totalmente controlada y con riesgo de que los que se sindicalicen sean despedidos-; si se logra eso luego hay que demandar cambios, si estos no se aceptan por parte de la empresa se requiere emplazar a huelga, esperar la negociación, luego iniciar la huelga y que esta sea declarada legal por las autoridades. Se trata de una ruta que resulta casi imposible para la mayoría de los trabajadores, pero hay experiencias en todo el país en las que la clase obrera se organizan y paran la producción, toman las calles o incorporan otras formas de protesta y logran cambios, eso lo podemos lograr, así lo hicieron los jornaleros agrícolas de San Quintín en Baja California o el movimiento 20/32 en Matamoros Tamaulipas”, expresaron.
*Si requieres una asesoría legal mayor sobre lo abordado en esta nota puedes contactar al despacho del Maestro Carlos Suárez Benhumea a través del correo despachojuridicolaboral@live.com.mx
También puedes contactar en sus redes sociales a la Unión General de Trabajadores de México.
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