Previo a la publicación de esta investigación, la UAEMex fue consultada al respecto a través del área de Comunicación Universitaria. No obstante, a pesar de comprometerse en varias ocasiones a dar su postura, hasta el momento de esta publicación, Todo en Contra no ha recibido dicha respuesta.

La empresa Operadora Multiregional de Medios S.A. de C.V ha recibido, desde el 2022, más de un millón de pesos por parte de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx), a cambio de inserciones publicitarias que promocionan actividades universitarias. Se trata de la empresa propietaria del periódico Impulso Estado de México, que tiene denuncias laborales públicas de empleados a quienes ha defraudado con incumplimiento de pagos de salarios y prestaciones.

Además, el diario Impulso se declaraba, hasta diciembre de 2023, como una publicación impresa, aunque dejó de producir ejemplares desde hace por lo menos dos años. En cambio, generaba diariamente la ilustración de su portada de manera digital, la cual subía a un muro de Facebook. Sin embargo, las notas que se anunciaban en esa portada no existían en ninguna versión, ni digital ni impresa. Para justificar los convenios publicitarios con clientes, Impulso imprimía unos cuantos ejemplares que servían como “testigos” y se entregaban a las diversas oficinas de Comunicación Social. A pesar de eso, seguían facturando a instancias públicas, como la UAEMéx.

De los fraudes cometidos por Impulso contra sus trabajadores, dieron cuenta los periodistas Arturo Hernández, Rafael A. Ybarra, y Sonia Jessica González, que desde abril del 2020 y en distintas oportunidades hicieron denuncias públicas en redes sociales y diarios de Toluca relativas al funcionamiento de esa empresa.

Estas no fueron las únicas denuncias, la situación escaló en el mes de junio de 2023, cuando cuatro trabajadores iniciaron su demanda en el Tribunal Laboral de la Región Judicial de Toluca, con residencia en Xonacatlán y salieron a protestar en agosto de 2023 frente a las oficinas del periódico, ubicadas en Metepec, Estado de México. En esa oportunidad denunciaron que eran más de 15 trabajadores con los que Impulso tenían adeudos salariales y de prestaciones, algunos por hasta 100 mil pesos.

“No nos pagan, nuestro daño patrimonial es grave, no podemos seguir con esta situación (…)” expresó en aquel momento César Romero, trabajador del área de Rotativa, que lleva una de las demandas contra la empresa.

Una de las instituciones que mantuvo el financiamiento del periódico fue la mencionada UAEMéx, que entre 2022 y 2023 entregó al menos un millón 106 mil 665.32 pesos en convenios. Los últimos dos —a los que tuvo acceso Todo en Contra mediante una solicitud de Transparencia— corresponden al periodo del 5 de enero al 30 de junio de 2023, por el que la institución pagó 386 mil 666 pesos (UAEM/DRM/CC10103/0123/050) y al periodo del 1 de julio al 31 de diciembre por la que pagó el mismo monto (UAEM/DRM/CC10103/0723/055).

Para estos convenios, que fueron firmados por la directora general de Comunicación Universitaria, Ginarely Valencia Alcántara, la Universidad señaló —en la respuesta a la solicitud de información 00007/UAEM/IP/2024— que no contaba con una expresión documental que indicara los criterios que emplearon para la selección de medios de comunicación. Sin embargo, la realizaban “con base en las necesidades de comunicación e impacto de difusión de la Universidad Autónoma del Estado de México”.

Un periódico fantasma

En entrevista, el ex trabajador del área de Impresión del diario Impulso, César Romero, narró que los dueños del periódico engañaban de manera permanente a quienes contrataban servicios de publicidad, pues el tiraje que presumían era sustituido por apenas unos cuantos ejemplares que servían de testigos. Con el paso del tiempo, aun éstos fueron cada vez menos.

De contar con tirajes de hasta 10 mil ejemplares durante la campaña del priista Enrique Peña Nieto a la presidencia de México, para el 2022 el tiraje era de 400 a 500 ejemplares. Para el 2023 bajó a sólo 30 ejemplares y para junio de 2023, ante la falta de pago y el inicio de sus demandas, los trabajadores dejaron de imprimir el periódico y las máquinas quedaron detenidas desde entonces.

Pese a esta situación, la Universidad y otras instituciones aceptaron facturas por las que se cobraban inserciones que se publicaron en tirajes mínimos que no correspondían a las cantidades que se les había anunciado, y que para junio de 2023 ni siquiera se imprimieron.

El diario Impulso es representado por Sheila Marlene García Tovar en los convenios con la UAEMéx, pero los accionistas de esa publicación, de acuerdo con el Registro Público de Comercio, son Alejandro Enrique Zendejas Hernández y Alejandro Salgado Negrete.

De acuerdo con testimonios de los ex trabajadores, en los últimos meses del 2023 sólo un diseñador era pagado por los dueños para generar una imagen de portada con la cual actualizaban la página web y un muro de Facebook, desde el que se aparentaba un funcionamiento regular.

Responde UAEMéx con información incompleta

Cuando se le solicitó a la Universidad “copia de las facturas emitidas, los expedientes y anexos, así como los testigos que le fueron entregados a la UAEMex por parte de la empresa Operadora Multiregional de Medios, S.A. de C.V. en el cumplimiento de los contratos celebrados con la institución del 1 de enero de 2023 hasta el presente (00311/UAEM/IP/2024)”, la institución entregó facturas y testigos del 2022, motivo por el cual Todo en Contra ingresó el recurso de revisión 01763/INFOEM/IP/RR/2024, para que el caso fuera analizado por parte del Instituto de Transparencia, Acceso a la Información Pública y Protección de Datos Personales del Estado de México y Municipios, pues la información entregada fue incompleta, violando el derecho al acceso a la información.

Cambiar los medios de comunicación

Las condiciones laborales en los medios de comunicación  de acuerdo con la Asamblea de Trabajadoras y Trabajadores de medios contra la precarización laboral sección Edomex, mantienen un estado crítico.

Mediante una encuesta, esta organización ha documentado, desde el año pasado, que la mayoría de los trabajadores de medios del Valle de Toluca no cuentan con contrato de trabajo, no se les proporciona servicio médico ni seguridad social por parte de las empresas, se les despide sin liquidación, ganan menos de 8 mil pesos al mes, no cuenta con fondo de ahorros y no ha recibido incentivos ni aumentos salariales; es decir, que se violan sistemáticamente los derechos laborales. A esto se le suma la censura y la violencia que han vivido la mayoría de los periodistas al momento de realizar su trabajo.

Esta situación es resultado de la complicidad del estado con las empresas de medios, pues desde las instituciones se destinan recursos públicos para publicidad de manera indiscriminada, y hay una verificación prácticamente nula de las condiciones laborales por instancias como la Secretaría del Trabajo.

Por esta razón, el caso de los trabajadores de Impulso y las demandas de verificación de las condiciones laborales, así como cambios en la asignación de recursos públicos  ya han sido presentadas al gobierno de Delfina Gómez desde los primeros días de su gobierno; sin embargo, hasta el momento la situación se mantiene sin cambios sustanciales.