Crónica y fotos: Patricia Ramírez

El polvo de extintor se dispara desde atrás de los escudos de la policía estatal apostada para proteger los muros del Palacio de Gobierno, las mujeres vestidas de negro que han derribado las rejas y pintan los escudos se alejan momentáneamente; trasladan a una de sus compañeras caída y vuelven, con el respaldo en gritos del contingente de cientos, miles de mujeres que en Toluca marcharon el 8 de marzo.

“¿Dónde estaban cuándo las mataron?”, gritan.

La escena del final de la marcha convocada por diversas colectivas feministas se repite: las vallas son removidas, las mujeres entran y la policía dispara el polvo químico seco desde los extintores. Hay una característica particular: los policías hombres son protegidos: entre ellos y las feministas hay una endeble fila de mujeres “policías de género” que hacen de escudo. Alguien de seguridad estatal decidió que ellas podrían aminorar el impacto de un reclamo, en paradójica protección a hombres que, a su vez, cuidan las paredes del edificio representativo del gobierno de una entidad en la cual, en enero de 2024 – según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública– ocupó el primer lugar en delitos de feminicidio.

“Así nos cuidaran a nosotras, como a las paredes”, gritan.

En un siguiente disparo de extintor cae una mujer más y antes de que pueda levantarse recibe continuos disparos de polvo que se extiende; las mujeres se repliegan pero vuelven. Se da paso a una ambulancia a la que sube la mujer agredida durante un minuto por los extintores.

Un poco más lejos, un par de manifestantes salen en brazos de las demás, la colectiva feminista Raíces fuertes reportó 8 lesionadas, intoxicaciones y la fractura de un menor al momento de la huida del polvo químico seco.

En los altavoces suena “Canción sin miedo” de Vivir Quintana y las mujeres alrededor la entonan, hay una invitación para sentarse y seguir con la lectura de un pliego petitorio.

“Pinche gobierno culero”, gritan.

Fue un amplio recorrido con diversos puntos de salida el que desembocó en el centro; familiares de víctimas de feminicidio o desaparición, un numeroso contingente de mujeres e infancias, carriolas, bebés, niños y niñas; amas de casa, discapacitadas, empleadas, universitarias, académicas, emprendedoras. Ante las caras inexpresivas, burlonas o sonrientes de espectadores de tantas edades, todas gritaron para visibilizar la violencia, exigiendo justicia y la aparición con vida de las desaparecidas, una participación masiva por ser 8 de marzo, corolario de todo el trabajo que las mujeres de diversos sectores, edades, profesiones e ideologías realizan cotidianamente.

“Vivas se las llevaron, vivas las queremos”, gritan.

En las cartulinas y las mantas se leen algunas frases incluso poéticas, las denuncias en los altavoces hablan de feminicidios, violaciones y acoso; los casos que son cotidianos tienen voz: la madre o hermana de una asesinada, las amigas o familiares de desaparecidas; la madre de una niña violada.

“Verga violadora, a la licuadora”, gritan.

Es en el pliego petitorio que se lee al final del recorrido, durante los ataques de la policía con los extintores, donde se resumen algunos de los problemas de fondo: exigir el reconocimiento y respeto de los derechos; alto a la precariedad laboral, trabajos dignos, prestaciones sociales, contrato laboral, acceso a la seguridad social y vigilancia de las autoridades del trabajo para sancionar a las empresas que incumplan con otorgar derechos laborales. 

“¡Gobierne quien gobierne, las mujeres se defienden!”, dice la oradora.

Las mujeres se han regado por el jardín de la Plaza de los Mártires, descansan en el piso porque las bancas son escasas, no hay mucha sombra; ahí, estudiantes invitan a todas a una puesta en escena, tatuadoras ofrecen descuento a quienes hayan asistido a la marcha, otras venden paliacates bordados por ellas mismas; unas más se congregan y denuncian alrededor del asta, se escucha el resto de las exigencias del pliego petitorio:

Que las instituciones gubernamentales paguen lo justo a las artistas cuando contratan sus servicios, garantía de trabajos dignos a las madres trabajadoras, que ser madres no sea un problema o impedimento para laborar.

“Con falda o pantalón, respétame, cabrón”, gritan.

Las exigencias se multiplican: de la lucha por el derecho al aborto hasta la implementación de estructuras de salud en donde se respeten los derechos de las  mujeres y la exigencia de sanciones ejemplares a los servidores y funcionarios públicos que ejerzan cualquier tipo de violencia, discriminación, machismo, misoginia, incluido el hostigamiento y acoso laboral, el discurso del 8 de marzo se construye con las voces y necesidades de muchas.

“No que no, sí que sí, ya volvimos a salir”, gritan.

Las huellas del paso de la marcha se quedan en el piso y las paredes, fueron puestas para visibilizar la violencia, para evitar que las desaparecidas sean olvidadas, para impedir la normalización de los feminicidios, para exigir justicia a un gobierno mexiquense cuya policía suelta polvo para dispersar a las manifestantes y envía a sus trabajadores, –temprano, al día siguiente– a que con agua, jabón y lija, limpien y pinten cada denuncia con inmaculada pintura blanca.

Ni una más, ni una más, ni una asesinada más, gritan.

Esta es la voz completa del posicionamiento de la movilización:

POSICIONAMIENTO FEMINISTA EN EL ESTADO DE MÉXICO EN EXIGENCIA COLECTIVA POR EL 8 DE MARZO DÍA DE LA MUJER TRABAJADORA 2024

Desde las Colectivas, Organizaciones, Víctimas y Familiares, Defensoras de Derechos Humanos, Mujeres Feministas, Disidencias Sexuales, Activistas Independientes y Universitarias nos pronunciamos y hacemos un exhorto de acción a las autoridades del EDOMEX;

Mtra. Delfina Gómez Álvarez, Gobernadora del Estado de México
Diputadas y Diputados Locales: Integrantes del Poder Legislativo del Estado de México.
Poder Judicial del Estado de México
Tribunal Superior de Justicia del Estado de México
Fiscalía General de Justicia del Estado de México
Fiscalía Central para la Atención de Delitos Vinculados a la Violencia de Género.
Centros de Justicia para las Mujeres
Secretaría General de Gobierno del Estado de México
Secretaría de las Mujeres del Estado de México
Secretaría de Bienestar del Estado de México
Secretaría de Salud del Estado de México
Secretaría de Seguridad del Estado de México
Secretaría del Trabajo del Estado de México
Secretaría de Desarrollo Económico del Estado de México
Comisión de Derechos Humanos del Estado de México
Rector de la Universidad Autónoma del Estado de México
Presidentes Municipales del Estado de México
Institutos Municipales de la Mujer

P R E S E N T E S :

Cada 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer Trabajadora, salimos a las calles para exigir el reconocimiento y respeto de nuestros derechos, reconociendo y reivindicando a las mujeres que impulsaron la conmemoración del 8M en el siglo XlX. Su lucha no paró hasta conseguir jornadas laborales adecuadas, condiciones de trabajos dignas, la colectivización del trabajo de cuidados, el fin a la guerra, sustento, comida, autonomía y hoy más de un siglo después, las mujeres seguimos padeciendo las mismas consecuencias del sistema capitalista y patriarcal.
Este #8M en Toluca, salimos a las calles a gritar: ¡Gobierne quien gobierne, las mujeres se defienden! porque estamos cansadas del uso electoral del movimiento feminista, de las falsas promesas de los y las candidatas que nos usan como botín político, pero no implementan medidas eficaces para mejorar las condiciones de vida de las mujeres.
En el Estado de México hay más de 3,2 millones de mujeres que laboran y quienes reciben salarios que son insuficientes para cubrir las necesidades básicas. Según datos del INEGI, en el sector formal una mujer gana un sueldo promedio de 8 mil 500 pesos, mientras que en el sector informal, la cifra desciende a 4 mil pesos. Además, las mujeres se enfrentan a falta de contratos, prestaciones, seguridad social, guarderías y violencia laboral.
En la entidad, la violencia de género continúa mermando la calidad de vida de las mujeres. De acuerdo con cifras oficiales, durante el 2022, se cometieron 138 feminicidios y los delitos contra la seguridad y la libertad sexual, en conjunto, sumaron 13 mil 435 denuncias, lo anterior a pesar de que se destinaron millones de pesos para combatir esta problemática.
Estas son solo dos grandes condiciones a las que nos enfrentamos las mujeres, pero también somos víctimas del poco acceso a la educación sexual y reproductiva, del acceso a la salud integral de calidad y la vivienda. No olvidamos que han sido presentadas 4 iniciativas en la Cámara de Diputados, las cuales están congeladas, dejando al aborto legal siendo una deuda con las mujeres y personas gestantes en el Estado.
A pesar de que en el 2020 de acuerdo a la Fiscalía General del Estado ocupábamos el primer lugar a nivel nacional con 5 casos de violaciones al día, la organización civil GIRE reportó que del 2010 al 2020 únicamente habían registrado 79 abortos por NOM046. Una verdadera negligencia, que evidencia las barreras de acceso y la falta de transversalidad en la atención para niñas, adolescentes, mujeres y feminidades.

Por ello, hacemos hincapié en que las políticas públicas implementadas al día de hoy NO han generado el impacto que se esperaba, seguimos sin palpar la disminución de las distintas formas de violencia de género de las cuales somos víctimas todos los días. Así mismo, las oportunidades estudiantiles, laborales, sociales continúan limitadas para la mayoría de nosotras y nosotres.

Las y les estudiantes no nos hemos sentido seguras en los espacios académicos, constantemente se vive acoso sexual por nuestros mismos compañeros y maestros, sin que realmente exista una sanción, pues nuestros agresores continua estudiando o impartiendo clases, mientras que nosotrxs vivimos con miedo, vergüenza, dudas e inseguridad.

El dolor tan grande que embarga a las personas que viven esperando a su puerta por quienes hoy ya no están, esas mujeres y personas nb que vivas se las llevaron y que seguiremos buscando, exigiendo por verdad, por protocolos más justos, eficientes, más rápidos y sin corrupción, que nos permitan encontrar a las personas que amamos. Porque una ficha de búsqueda no marque más vidas.

Finalmente, el acceso a la justicia es esta condena que nos embarga en este país de impunidad, revictimización y burocracia que entorpecen los casos de NUESTRAS vidas. No somos una cifra, el debido proceso debe respetarse para todas, haciendo que las asesorías sean cada vez más simplificadas, haciendo que los jueces no emitan en favor de, agresor, que nuestro sistema de justicia capacite y de una vez por todas haga su trabajo de manera exhaustiva, pues nos faltan muchas hermanas, nos acompañan a quienes no queremos perder y vemos crecer a quienes merecen otro mundo, otra posibilidad.

Por estas razones, las que suscriben Colectivas, Organizaciones, Víctimas y Familiares, Defensoras de Derechos Humanos, Mujeres Feministas, Disidencias Sexuales, Activistas Independientes y Universitarias nos dirigimos a ustedes, para exigirles que resuelvan nuestras peticiones. En virtud de que como funcionarios y servidores públicos tienen la obligación, función, competencia y atribución de brindar soluciones oportunas, eficientes y objetivas ante la desigualdad, las violencias, las injusticias, la precariedad, discriminacion y en general ante la gran brecha que aún existe en pro de nuestros derechos humanos como mujeres y disidencias sexuales.

No queremos medidas paliativas para estas violencias que dejan sin vida, con lesiones físicas y psicológicas a mujeres en nuestro Estado y en todo el país. Las políticas públicas que se implementan deben de contar con perspectiva de género, ser de acceso para todas las mujeres y personas LBTQIANB+ sin distinción alguna y enfatizando en dar visibilidad a los grupos poblacionales con más brechas de desigualdad (mujeres cisgénero, mujeres trans, mujeres que se dedican a labores de cuidado, mujeres trabajadoras, personas no binarias, mujeres en situación de vulnerabilidad económica y educativa, mujeres adultas mayores, mujeres jóvenes y adolescentes, entre otrxs) y buscando mejorar el bienestar humano. Actualmente, tener una visión interseccional de las demandas y necesidades de la población nos acerca a resultados más integrales y resoluciones útiles.

Demandas:

1. Alto a la precariedad laboral y el trabajo gratuito que propician las instituciones gubernamentales en contra de nosotrxs, principalmente en lxs estudiantxs, artistas, mujeres jóvenes, embarazadas o mujeres de grupos vulnerables.
   Exigimos trabajos dignos, con salarios que dignifiquen nuestro trabajo, prestaciones sociales, contrato laboral, acceso a la seguridad social y vigilancia de las autoridades de trabajo para sancionar a las empresas que incumplan con otorgar derechos laborales.
   Exigimos un alto al hostigamiento y acoso laboral.
2. Que las instituciones gubernamentales paguen lo justo a lxs artistas cuando contratan sus servicios. Dar apoyo a creadoras de arte para la venta de sus productos y en caso de que las instituciones requieran de su trabajo y participaciones debe ser remunerado.
3. Becas dignas a lxs estudiantxs, para que puedan continuar su desarrollo académico y profesional. Para que no tengan que abandonar la escuela por la falta de acceso a una educación gratuita, así mismo, que ser madre no sea una limitante para continuar sus estudios.
4. Garantía de trabajos dignos a las madres trabajadoras, que nos permitan desarrollarnos laboral y profesionalmente, sin que ser madres parezca un problema o impedimento para laborar.
5. La garantía de los derechos humanos de nuestrxs hijxs. Pues nos enfrentamos a la falta de estancias infantiles que permitan el adecuado cuidado y seguridad de nuestrxs hijxs, para que nosotrxs podamos estudiar y/o trabajar. Y que las instituciones y empresas nos permiten ejercer nuestro derecho a la crianza, sin negarnos permisos si nuestros hijxs se enferman. Ya que principalmente las instituciones gubernamentales violan estos derechos y nos usan como mano de obra desechable a las mujeres que somos madres.
6. Otorgar reconocimientos y estímulos a las mujeres con trayectorias destacadas en las diversas áreas y disciplinas en las que se desempeñan con convocatorias exclusivas.
7. Exigimos seguimiento, vigilancia e información acerca de los derechos que poseen las médicas de pregrado y posgrado, y personal del area de la salud, ya que existe un sistema fundamentado en el constante acoso, violencia y hostigamiento laboral, en escuelas y hospitales, situaciones que provocan la deserción, problemas psiquiátricos, intentos de suicidio y suicidios consumados en la población femenina.
8. Visibilizar y legislar la violencia psicológica que viven muchas mujeres en sus hogares, centros de trabajo, escuelas, no porque no se vea, no significa que no existe. Ya que hace tanto daño y destruye de la misma forma que las otras formas de violencia. Tanto que lleva a lxs mujeres a cuadros de ansiedad, estrés postraumático, depresión, suicidio y cuyo origen de estos sintomas es la violencia que viven.
   Por lo tanto, se debe garantizar una adecuada y real atención a la salud psicológica y mental. Brindar tratamientos psicológicos y psiquiátricos gratuitos. Así mismo, exigimos especialistas en psicología y psiquiatría con perspectiva de género.
9. Implementar estructuras de salud en donde se respeten los derechos de las mujeres y también para aquellas que forman parte de la diversidad, clínicas y servicios de salud en las cuales los profesionales que atienden se encuentren realmente capacitados en perspectiva diversa y de género.
10. Ampliar el acceso a todos los estratos sociales con información relevante y objetiva, sin estigmatizaciones sobre salud sexual y reproductiva, de género, menstruación digna, tipos de violencia, a través de las escuelas, centros comunitarios, agenda de trabajo de las autoridades municipales.
11. Instaurar dentro de la papelería que se maneja a nivel institucional y privado, hojas de referencia específicas para poder canalizar a mujeres víctimas de violencia (en todas sus esferas) a la instancia que corresponda y reciba una atención eficiente sin tanta burocracia. Uso de la policía de género para el traslado al lugar donde es referida o canalizada la víctima.
12. Sanciones ejemplares a los servidores y funcionarios públicos que ejerzan cualquier tipo de violencia, discriminación, machismo, misoginia, incluido el hostigamiento y acoso laboral. Así como destitución a aquellos funcionarios y servidores públicos que no den resultados y entorpezcan las investigaciones para el acceso a la justicia.
13. Exigimos a los Legisladores del Estado de México la aprobacion de la Interrupción Legal del Embarazo, para que las mujeres y personas gestantes que deseen realizar un procedimiento de aborto reciban la atención, orientación y tratamiento en las instituciones de salud publicas de manera segura y gratuita.
14. Verificar el seguimiento y resolución de los casos que acuden de manera personal o por referencia de alguna instancia ya que las instituciones los evaden o no apoyan con información correcta y oportuna, hay un descuido en los casos de violencia situación alarmante que pone en riesgo la vida de mujeres, niñas y adolescentes. Para ello se requiere la colaboración conjunta de Fiscalías, Ministerios Públicos, Comisión de Víctimas, Comisión de Búsqueda de Personas, entre otras dependencias encargadas del proceso al acceso a la justicia.
15. Las y los exhortamos a brindar las facilidades para que las colectivas y organizaciones feministas sean contempladas e incluidas para la evaluación de las políticas públicas e iniciativas que se realicen, ya que es un trabajo colectivo y social, el cual debe alejarse de la apropiación y politización de los movimientos.
16. Real capacitación en perspectiva de género y sensibilización de los servidores públicos, ya que somos víctimas de violencia institucional constantemente, pues en las instituciones donde se solicita un servicio o atención se nos continua revictimizando, se siguen reproduciendo micro machismos y minimizan nuestras demandas. Realizar evaluaciones constantes a los funcionarios y servidores públicos en perspectiva de género.
    ¡Ni una más, ni una menos!
    ¡No es una, somos todas!
    ¡Gobierne quien gobierne, las mujeres se defienden!

Colectivas feministas y mujeres organizadas en el Valle de Toluca